29 abril 2011
Un día me esperaba a mí mismo
A veces, muy pocas veces, uno tiene el privilegio de sostener en las manos un libro tan hermoso como un libro hermoso. Ni más ni menos. Un libro de diseño cero, un libro que invita a leer, un libro que es todo lo que una persona razonable espera de un libro. Un libro en el que se ha cuidado la tipografía, la selección del papel, el color de la cubierta, la partición de las palabras, las líneas viudas... La sensación de belleza que transmite un libro-libro, un libro hecho con amor, es tan difícil de explicar que lo mejor es no decir nada. Compren Un día me esperaba a mí mismo de Miguel Ángel Ortiz Albero, editado por Jekill&Jill editores y entenderán qué quiero decirles.
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1 comentario:
¡Muchas gracias por los piropos, Víctor!
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