26 octubre 2006

La [i]racionalidad de la rotonda

El más vendido

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El rotondismo. El modelo Rotonda de la MAZ (hay que leer varias veces al día a Mariano Gistaín) es el paradigma de la racionalidad de las obras y reformas. Un botón de muestra: hace un par de años, colocaron quitamiedos a ambos lados de la estrecha carretera de Garrapinillos. Los peatones no podían ni acercarse a las paradas de autobús. Estos días la carretera está cortada en dirección Zaragoza. Están ensanchándola (arrancando los quitamiedos que con tanto mimo colocaron hace nada). Nos esperan nueve meses de obras. Lo hacemos todo varias veces y lo hacemos casi siempre mal.
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Lo de los bienes de la Franja y tal, Salinas. Lo cuenta mejor que nadie Marisancho. Hay que seleccionar un comando de elite de infanticos del Pilar y organizar una operación rescate. Ya vale de estudiar la posibilidad de movilizarnos o de que los alcaldes se reúnan a ver si le escribimos al Papa.
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En Tauste tuvo que ser. Que inhabiliten de una vez a este tal monseñor Ureña.

2 comentarios:

Javier López Clemente dijo...

He sufrido la rotonda de la MAZ muy pocas veces y siempre que he estado engullido en su carriles he tenido unas ganas irrefrenables de no volver a salir, es como si el Triángulo de las Bermudas se hubiera instalado al lado de Parque Goya II, por cierto, durante los tres meses que viví allí, uno de mis pasatiempos favoritos era contemplar absorto el atasco dirección norte.

Anónimo dijo...

Sí, se podría habilitar esa rotonda como un pasatiempo más de la Expo

m ; )

Gracias Víctor.

Me gusta eso que dices hoy de que guardas cosas en el disco duro. cada día lloro por lo que perdí en un macintosh, ay. No vale nada, pero sse perdió. Lo mejor es echarlo cuanto antes al mundo.